Esta madrugada me despertaron los zorzales. Son los que le ponen el audio a la primavera que se despierta entre los edificios en que vivo, porque aunque sean edificios la primavera también les llega. Y los zorzales, como siempre, se encargan de traerla.
sábado
La muerte en calzoncillos
En su novela Mañana en la batalla piensa en mí, Javier Marías habla de la muerte que con
gracia ridícula puede sobrevenirnos, y de la oportunidad para reírnos de la
muerte si la que despierta risa le sucedió a alguien desconocido, lejano o
enemigo. Por el contrario de la muerte digna, conciente, que podríamos
esperar; o no conciente pero trágica,
dramática, o de un calmado apagarse y dejar de funcionar, nos puede llegar a
cualquiera una muerte en calzoncillos. La novela trae recuerdos de
infancia de chistes contados en velorios, de comentarios cuando los chicos no
estaban presentes, y de lo ridícula que puede ser la muerte cuando
le asociamos una majestad eterna.
Así
enumera Marías unas pocas posibilidades cotidianas y masculinas:
“Nadie piensa nunca que nadie vaya a morir en el momento más inadecuado a
pesar de que eso sucede todo el tiempo…A los vivos y al que se muere —si tiene
tiempo de darse cuenta—les avergüenza a menudo la forma de la muerte posible y
sus apariencias, también la causa. Una indigestión de marisco, un cigarrillo
encendido al entrar en el sueño que prende las sábanas, o peor aún, la lana de
una manta; un resbalón en la ducha —la nuca— y el pestillo echado del cuarto de
baño…Morir en calcetines, o en la peluquería con un gran babero, en un
prostíbulo o en el dentista; o comiendo pescado y atravesado por una espina;
morir a medio afeitar con una mejilla llena de espuma y la barba ya desigual
hasta el fin de los tiempos si nadie repara en ello y por piedad estética
termina el trabajo, por no mencionar los momentos más innobles de la
existencia, los más recónditos, de los que nunca se habla fuera de la
adolescencia…Las carcajadas vienen
porque se habla de un enemigo por fin extinto, alguien que nos hizo
afrenta o que habita en el pasado desde hace mucho, un emperador romano, un
tatarabuelo, o bien alguien poderoso en cuya muerte grotesca se ve sólo la
justicia aún vital, aún humana, que en el fondo desearíamos para todo el mundo,
incluidos nosotros”.
Sin ser emperadores romanos ni todavía tatarabuelo de nadie, quién no sabe de alguna ridícula muerte graciosa de la que se haya reído...
viernes
VERDADES DE LOS CUENTOS
Obligada por el cuento, Caperucita Roja debe vestirse con su llamativa capa cuando sabe perfectamente que en el bosque hay que usar verdes y marrones. Tal vez así no sería tan visible. Suspira.
El Lobo está harto de hacer de lobo feroz. Esperándola en un recodo para hacer que la sorprende la ve desde lejos, como siempre, y bosteza.
jueves
Próxima presentación de mi novela Un día en las vidas de Jorge-Matías
expectativa para anunciar que en octubre saldrá
editada mi novela "Un día en las vidas de Jorge-
La novela trata de la jornada que el protagonista, Jorge-Matías, transcurre en esta Buenos Aires colapsada, frenética, sucia, y de sus herencias y recuerdos tanto como de la búsqueda que trata de hacer yendo de acá para allá en un día agobiante de calor, mientras intercambia con toda clase de gente, más o menos chiflada, y toda clase de situaciones, cómicas, agresivas o conmovedoras.
Acá estoy, en la foto, trabajando con las pruebas de galera. La presentación será en octubre,
¡Están todos invitados!
domingo
Bibliotecología viviente: bibliotecas de los pueblos originarios
Bibliotecología viviente: bibliotecas de los pueblos originarios de Argentina, que recopilan historias orales, tradiciones, cultura, simbología, reivindicaciones, y más.
En el blog QUÉ SABE QUIÉN se presenta EL OREJIVERDE. Vale la pena saber el porqué de este extraño nombre y conocer otras bibliotecas y emprendimientos alrededor de las luchas y visiones de los pueblos originarios.
QUE SABE QUIEN: El Orejiverde: Comparto con ustedes una excelente novedad, punta de lanza de un proyecto que en lo sucesivo pretende ofrecer la más completa informaci...
En el blog QUÉ SABE QUIÉN se presenta EL OREJIVERDE. Vale la pena saber el porqué de este extraño nombre y conocer otras bibliotecas y emprendimientos alrededor de las luchas y visiones de los pueblos originarios.
QUE SABE QUIEN: El Orejiverde: Comparto con ustedes una excelente novedad, punta de lanza de un proyecto que en lo sucesivo pretende ofrecer la más completa informaci...
jueves
La SAI publica un Cuento de bibliotecarios
En su último nro, del mes de julio, el Boletín de SAI Sociedad Argentina de Información, publica mi cuento Oscuro objeto del deseo, uno de los Cuentos de bibliotecarios.
¡Muchas gracias, SAI!
¡Muchas gracias, SAI!
Oscuro objeto del deseo
un cuento de bibliotecarios
Por Isabel Garin
Por Isabel Garin
Isabel Garin es bibliotecaria en el Hospital de Clínicas General San Martín de Buenos Aires.
domingo
Por algunos caminos de ciertas vidas
Viajo distraída en el colectivo, perdiéndome en el transcurrir de la ciudad
por la ventanilla, cuando algo me hace volver: un muchacho, que aparenta unos 25
años mal llevados, está distribuyendo a
cada pasajero una de esas notas que les evita hablar cuando reparten
estampitas a cambio de una moneda. Pero
esta nota me llama la atención porque es grande, una hoja entera de cuaderno o
de bloc, rayada, y la espero con curiosidad. Cuando recibo mi copia y la leo mi
curiosidad no se ve decepcionada: está pidiendo una moneda a cambio de mostrar
su sueño. A modo de título lleva el verso que dice “Los caminos de la vida no
son los que yo esperaba” acompañado del dibujito de unas notas musicales, y
luego dos ojos muy abiertos encabezan junto al Sr. y Sra. Se presentan después
como dos hermanos de la calle, Nahuel y Jesús, que no tienen familia. Dicen que
quieren que su palabra valga y hacer entender su experiencia, y narran sus
hambres, sus fríos y los desprecios que sufren por ser de la calle. Cuentan que
muchas veces piden comida en los negocios y luego ven que la tiran a la
basura. Pero a cambio de la ayuda
solicitada por escrito que aparece al final, algo para sobrevivir, dicen también
“somos soñadores igual que ustedes, y estos dibujos son nuestro sueño”: un sol
gigante mira hacia abajo, a la ciudad, con una gran sonrisa con dientes, más
arriba, en el cielo, pasan unas nubes; el Obelisco está rodeado de globos que
vuelan hacia ese cielo, y también vuelan una gran mariposa, una bandada de
pajaritos, un avión y un barrilete. Bajo el sol aparece también una casa,
custodiada por dos álamos.
La letra y los dibujos parecen ser
de un niño, pero la redacción no es infantil. Me vuelvo a mirar al muchacho,
que ha seguido entregando copias hacia el fondo del colectivo. Viste ropas muy gastadas pero limpias y
prolijas, y tiene una expresión reconcentrada. Le voy a pedir que a cambio de
la ayuda que voy a darle me deje la copia cuando vemos que el chofer se ha
levantado de su asiento, camina hasta la mitad del coche y con los brazos en
jarra le grita:
– ¡Juntá tus papelitos y bajate ya!
El tipo es bastante parecido a una mole, muy alto y gordo, y con una pelada
perfecta y completa que lo asemeja a algún luchador de ring o a un gladiador
con sobrepeso. Algunos cruzamos una mirada de desconcierto, yo miro al muchacho
que tomado de sorpresa se ha quedado paralizado pero el chofer no le deja
lugar a réplica. El muchacho empieza a recoger las fotocopias de su sueño, y el
chofer, que ha vuelto a su asiento, lo vigila por el espejo con mala cara mientras tiene parado el colectivo. Pregunto
en voz alta porqué tiene que bajar así, pero nadie contesta; solo el muchacho
me dice bajito, al pasar hacia la puerta, que él tampoco sabe porqué.
Baja, y la puerta se cierra con
violencia. El colectivo arranca. Que lo echen así no será inesperado en los
caminos de su vida.